Reconocer la importancia y los planteamientos en torno a la defensa de los Derechos Humanos atañe tanto a los estudiosos del Derecho como a la sociedad en general. Por tal motivo, en la UAM-A se inauguró el Seminario Permanente en Derechos Humanos, derechos indígenas, equidad de género, derechos de las mujeres y de la niñez, surgido a iniciativa de los académicos del Área de Investigación en Derechos Humanos y Alternatividad Jurídica Social, del Departamento de Derecho.
El coloquio se inició con la conferencia magna Los Derechos de los niños, niñas y adolescentes en los divorcios de alto conflicto, impartida por la Magistrada Rebeca Florentina Pujol Rosas, exalumna de la Licenciatura en Derecho de esta Unidad, quien abordó el tema del divorcio como un hecho que se ha incrementado entre las familias mexicanas de la actualidad.
La especialista señaló que en los hogares y en los juzgados continuamente se violentan los derechos de los niños. Explicó que en el caso de la pareja en proceso de divorcio, existe una lucha de poder que limita los canales de comunicación y, generalmente, usan a los hijos para la coerción entre cónyuges, a lo que, en términos del tribunal, se dice que “los padres se enfrentan a niñazos”.
A fin de evitar esa violencia hacia los derechos de los infantes, la Suprema Corte de Justicia, basada en la Corte Interamericana de Derechos Humanos, presentó el Protocolo de actuación para quienes imparten justicia en los casos en los que se involucran niños, niñas y adolescentes.
En este documento se establece que los menores son considerados como titulares de derechos; los padres y el Estado se establecen como garantes de que la infancia tenga asegurados tales derechos dentro de los juicios: seguridad física y mental, libre expresión, no discriminación, ser escuchado y respeto hacia su tranquilidad.
La Ley marca que los espacios en los que se llevan a cabo los juicios deben ser salas lúdicas; sin embargo, no se cuenta con ellas salvo en algunos Estados. Asimismo, el lenguaje jurídico no se ajusta a las necesidades comunicativas de los niños. “Es lamentable que gran parte del personal del Tribunal Superior –entre los que se encuentran mis homólogos y jueces–, no esté capacitado para entrevistar a los menores. Pese que el Tribunal imparte cursos de capacitación en este rubro para preparar al personal, la mayoría no asiste”, agregó.
Por su parte, la exdirectora del Centro de Convivencia Familiar Supervisada del Tribunal Superior de Justicia, la Doctora María Angélica Verduzco Álvarez Icaza, señaló que los niños necesitan –dentro y posterior al proceso de divorcio– el acompañamiento de un psicólogo, lo que les permitirá sentirse seguros y con elementos que les indiquen lo que pudiera suceder en su vida, aspectos que se rompen en el momento del divorcio y que los llena de angustia.
Ambas expertas coincidieron en expresar que es obligación del Estado promover los cambios hacia una jurisprudencia sensible y lograr la aplicación del concepto del interés superior del niño, como parte del camino jurídico y humanitario.
ISELA GUERRERO OSORIO